SERVICIOS

Revisa el estado general del motor, por lo menos dos veces al mes, centrando tu atención en que esté limpio y con todos los niveles de líquido como corresponde.

En caso de fuga de agua o aceite, límpiala y luego lleva el auto al mecánico para que solucione el problema, problemas pequeños generan problemas más grandes.

Limpia el motor, si sólo tiene polvo basta una limpieza con un trapo seco. Si tu motor está muy sucio, lo mejor es lavarlo con agua a presión, pero debes tratar de no tocar las partes eléctricas con el chorro de la pistola o manguera. Hazlo cuando el motor se encuentre frío.

Periódicamente debes revisar el nivel de aceite, fíjate que la bayoneta esté bien ubicada y que marque correctamente, es muy importante que el aceite se encuentre en el nivel correcto, ni más ni menos.

Asegúrate de que se encuentre fija, revisa que los cables estén bien ajustados a los bordes y en caso de que presenten ácido lo mejor es lavarlos con un cepillo y abundante agua.

Se debe cambiar por lo menos cada dos años, para que no pierda sus propiedades anticorrosivas.

Observa si están agrietadas o desgastadas, si es así, lo mejor es cambiarlas.

Mantén una supervisión constante, revisando que tengan la presión adecuada, procura rotarlas por lo menos una vez al año así el desgaste será uniforme y no olvides reemplazarlas a tiempo.

No deben estar pelados, sueltos o trozados ya que podrían ocasionar un corto circuito

La función del filtro de aire es la de proteger el motor al retener las impurezas del flujo de aire que entra al motor. El filtro de aire asegura así la buena calidad de la mezcla aire-carburante que integra los cilindros a través de las válvulas